En juicio abreviado se acordó una pena de tres años en suspenso, es decir no irá preso, a un delincuente que robó en una casa de Cinco Saltos, desvalijando una vivienda y llevándose una camioneta.
En efecto, Guillermo Esteban Riquelme reconoció su culpa, no lo lleva tras las rejas y le permite quedar en libertad, ya que estaba en prisión preventiva en la Comisaría 32 de Cipolletti.
La justicia lo sancionó aplicandole pautas de comportamiento y le prohibieron andar por Cinco Saltos por el término de cuatro años.
El robo
El robo se produjo la noche del 12 de julio último cuando Riquelme junto Nicolás Darío Núñez, previo a estudiar el escenario –“tareas de inteligencia» expresa el documento judicial- a bordo de un Ford Focus, ingresaron al domicilio aprovechando que sus moradores se encontraban de viaje.
En la maniobra también revelaron tener conocimientos delictivos, porque primero cortaron los cables de electricidad e internet antes de violentar un portón con una herramienta de corte, y una vez en el interior rompieron la sirena de la alarma exterior. Después forzaron la puerta principal de acceso y se apropiaron de una Toyota Cross que estaba estacionada en el garaje, dos notebooks, una PlayStation 4, un parlante JBL, varias joyas y una mochila que tenía un dispositivo para el rastreo mediante el sistema telefónico.
Captados por cámaras
Los ladrones luego escaparon en ambos vehículos y el botín en su poder. Los damnificados advirtieron el hecho cuando llegaron el día posterior. La Brigada de Investigaciones local comenzó a trabajar en el caso y a los pocos días lograron información relevante que los llevo hasta la capital neuquina, donde residen los sospechosos.
Entre otros indicios recabaron imágenes de cámaras de seguridad de esa ciudad que mostraban a la camioneta sustraída, y otras de un conocido hotel de la zona del alto que tomaron a Riquelme y Núñez en reiteradas ocasiones utilizando y estacionando el vehículo robado. Además, contaban con la señal emitida por el dispositivo tracking Airtag alojado en la mochila robada que los guió hasta el domicilio de Riquelme, donde hicieron un allanamiento y lo detuvieron días después.
A esos elementos le sumaron el secuestro de una de las computadoras sustraídas, elementos de corte y palanca, equipos de comunicación utilizados como inhibidores, ropa, guantes y llaves de los vehículos, los que también fueron requisados y secuestrados.
Acuerdo de pena
Riquelme fue imputado por el delito de“robo calificado por efracción” y quedó en prisión preventiva el 31 de julio por el término de cuatro meses.
El mes pasado, el 13 de septiembre, se llevó a cabo una audiencia en la que el fiscal Leandro López y el abogado defensor Elio García comunicaron que habían arribado a un acuerdo para cerrar la causa en un juicio abreviado, que establecía imponerle el castigo de prisión preventiva y las pautas de conducta.
La propuesta fue aceptada por el imputado, lo que involucró admitir que había cometido los hechos.
Las víctimas también prestaron conformidad. Además, la dueña de casa comunicó que el ladrón le había efectivizado una reparación económica, cuyo monto no fue precisado. Asimismo, le habían devuelto una de las computadoras.
El juez Marcelo Gómez avaló el acuerdo. Sostuvo que además de la confesión del delincuente, las pruebas reunidas en la investigación eran firmes para declararlo culpable. En cuanto a la pena, dijo que los tres años de ejecución condicional era ajustada a derecho, dado que el acusado carecería de antecedentes penales.
En cuanto a la situación judicial de Nicolás Darío Núñez, el cómplice, no se resolvió en este expediente.
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