Belén Castía es una joven mujer que persiguiendo una pasión y un anhelo, logró mucho más de lo que creyó posible. Nació en Cinco Saltos en donde vivió hasta los cinco años para mudarse junto a la familia a Rincón de los Sauces hasta los 17, cuando se anotó para cursar Medicina en la Universidad Nacional del Comahue (UNCo), sede Cipolletti.
La salud siempre fue su ámbito predilecto, desde la adolescencia tenía clara su vocación. “Siempre me gustó estar en el servicio social, en el bienestar del paciente, poder brindarle la posibilidad de una curación, acompañarlos en el proceso”, comenta en una nota que realizó el diario Río Negro.
En 2013 logró su título, pero nunca paró de estudiar.Se volcó por la cirugía general y empezó la residencia en el Sanatorio Juan XXIII. Luego de cuatro años rindió como integrante de la Asociación Argentina de Cirugía y no conforme con eso, se lanzó al desafío mayor: el camino de la subespecialidad en cirugía de tórax, un campo habitado principalmente por varones y desierto de mujeres en la región.
En marzo de 2023 aprobó un examen para ser especialista en Broncoscopia en el Hospital Posadas y finalmente, el 14 y 15 de agosto pasado, rindió para convertirse en médica especialista en cirugía de tórax, en el Hospital Militar Cosme Argerich y el Hospital Tornú.
Belén Castía logró todos estos hitos mientras se convertía en mamá de una nena, que hoy ya tiene cuatro años, junto a su pareja. “Es gracias a ellos todo este crecimiento. Ellos son, sin dudas, el sostén para todos estos años de formación académica”, balanceó.
“Esta es una especialidad demasiado puntual y por estadística, somos pocos los cirujanos en el país que hacemos exclusivamente tórax.Dentro de esa misma estadística, somos mucho menos las mujeres. Por eso es que soy la primera que tiene la especialidad de la Sociedad Argentina de Cirugía de Tórax en la Patagonia”, dijo.
La profesional valoró que esto es fruto del trabajo, el empuje y la formación y que recibió desde el grupo de cirujanos al que pertenece, denominado “Tórax Patagonia”. El equipo de Río Negro, que ya se expandió a trabajar a Neuquén, está conformado por José Sustercic, Alejandro Vona, Carlos Pochat y Matías Lescano.
Cuando terminó cirugía general se sintió en una encrucijada porque le gustaban dos caminos: la cardiovascular y la torácica. “Me atrapó la patología torácica, la metodología y el poco desarrollo que había en la zona», contó la profesional, quien vio en el nicho, una oportunidad.
A nivel país,la puerta de las especialidades a las mujeres la marcó siempre Buenos Aires. Belén admite la existencia de una “barrera” para las mujeres al inicio, sin embargo, cree que las oportunidades están.
“He aprendido de situaciones desagradables en donde se me ha prejuzgado por mi género y eso hace que hoy pueda plantearme algunas cosas de otra manera, me han ayudado a crecer profesionalmente», balanceó.
“Uno con su personalidad, pasión, voluntad, convicción, resiliencia, su sacrificio, con las ganas que uno puede tener de capacitarse; creo que todos, independientemente del género, pueden”, opinó la cirujana.
Un desafío en Shanghai, del otro lado del mundo
Ahora, la argentina se prepara para viajar a un hospital de China denominado “Shanghai Pulmonary Hospital” donde se formará y entrenará junto a otros cirujanos de tórax. En esa institución, que tiene reconocimiento internacional, se desarrollan las novedosas técnicas de Biotoracoscopía monopuerto (mini invasiva) y la cirugía robótica.
Se trata de unentrenamiento de 20 días en el que los especialistas pueden participar de unas 70 cirugías por día.“Es una posibilidad increíble y es un centro de referencia internacional en donde van todos los cirujanos del mundo a capacitarse”, contó la rionegrina.
Belén tiene este proyecto hace tres años y esta vez se dio. Ahora es inminente: tiene pasaje en mano para el 31 de octubre,pese a todas las dificultades económicas.
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