El gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck, se refirió en una nota periodística a varios aspectos de la actualidad nacional y de la relación entre el ejecutivo nacional y la provincia.

Reconoció que “la provincia y el país han cambiado, hoy cuando se reeditan antinomias como Milei si o Milei no», también a las propuestas provinciales se les complica el escenario a que nos llevan este tipo de antinomia. La situación de la polarización de la sociedad se ha vuelto más fuerte que antes”, afirmó.

Señaló que “al gobierno nacional no le interesa el interior y las provincias y la situación es difícil y compleja para Río Negro. Es todo un proceso en desarrollo sin ver las consecuencias”.

Agregó que “a pesar de esto, en el Congreso habría una apertura con los bloques de la oposición en la relación Nación-Provincia, pero que con el ejecutivo nacional hay un diálogo sin ningún tipo de consecuencias positivas”

Planteó una salida en conjunto con los gobernadores, donde también hay diferencias de acuerdo a sus propias realidades y puso como ejemplo el Impuesto a las Ganancias, que el Norte apoya y la Patagonia rechaza.

Reconoció luego que el presidente de la Nación tiene adhesión en Río Negro, pero que se analiza como un fenómeno social, ya que el ciudadano tiene definidos dos aspectos: rechazo a todo lo anterior y esperanza de cambio y afirmó que pesa más el pasado y la esperanza de salir adelante, que el análisis de la actual situación económica.

Esto hecho se refleja en Río Negro, donde hay sectores de la ciudadanía que le piden a la Provincia y a los municipios, lo que falta por los recortes nacionales. Todo es muy ambiguo, reconoció.

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